miércoles, 31 de agosto de 2011

Dunas de Concón: Cero Respeto



Las dunas de Concón tal como las conocemos hoy en día podrían desaparecer. Sin embargo, un grupo de gente se está movilizando en su defensa.

Para comenzar a contar la historia de las dunas tenemos que remontarnos a un millón y medio de años atrás. Hoy en día existen dos dunas, una sobre la otra. La que ha sido denominada como "duna mayor", que es la típica duna por donde uno sube y algunos se tiran en sandboard o corriendo, al frente del supermercado Líder, tiene 15 mil años.

Entre plantas y animales tiene más de 250 especies, tanto de la zona sur de nuestro país, de Atacama y mediterráneas, más que cualquier otra duna de Chile, única en el planeta y en el medio de la ciudad.

El año 2006 fue declarada como Santuario de la Naturaleza por el Consejo de Monumentos Nacionales, en un área que abarca 19,7 hectáreas y que se encuentra justo al frente de la entrada al sector urbanizado Bosques de Montemar, una ínfima parte que es insuficiente para contener la biodiversidad. La "duna mayor" no es parte del santuario.

La amenaza

"Chao con la duna mayor, la van a sacar desde su base, como Chuquicamata", dice Sergio Elórtegui, biólogo de la Universidad Católica de Valparaíso, autor del libro "Las Dunas de Concón" y que lleva más de 10 años investigando este lugar.

Serían 11 los edificios que se construirían sobre la "duna mayor" y otra cifra similar al otro extremo del santuario. Es decir, el área protegida quedaría encerrada por moles de cemento. La constructora Reconsa, dueña de las dunas, a excepción del santuario, está a cargo del proyecto y ya solicitaron el loteo a la Dirección de Obras de la Municipalidad de Concón.

Elórtegui señala que "estos cuatro años que pasaron (desde que se creó la zona protegida de las dunas) fueron de absoluta desidia por parte de la Municipalidad de Concón. Tenían un santuario declarado por el Consejo de Monumentos pero tenían un problema de deslinde con Reconsa porque estaban mal ubicados los monolitos. Reconsa alegó que estaban corridos no sé cuantos centímetros y que la municipalidad tenía que moverlos para que se le diera en comodato el santuario. La Municipalidad durante cuatro años no han movido los monolitos porque sabe que si le dan el comodato van a tener que ponerle energía y recursos para la conservación del santuario. Entonces la Municipalidad no mueve los monolitos, Reconsa no le da el comodato, y el santuario se convierte en tierra de nadie". "Como todo buen político actúan bajo presión, si hay bulla se ponen la pilas", agrega.

Pero esta no es la única "embarradita". El edificio Terraza Pacífico, de la constructora Paz, vulneró el santuario argumentando como resquicio legal que la fecha de ingreso del proyecto fue anterior a la declaración de santuario, entonces contruyeron su edificio. Autoridades ya han denunciado este hecho.

Red Duna Libre

Poco a poco este tema ha empezado a hacer ruido. Ya hay gente organizada en un movimiento denominado Red Duna Libre y que poco a poco ha comenzado a reunir gente tanto en Facebook como en Twitter.

La idea de esta agrupación es canalizar un sentimiento de indignación por parte de la comunidad de científicos y de gente que se enteró de esta solicitud por parte de Reconsa para construir en los sitios aledaños al santuario, o sea, todo el resto de la duna.

"Como ciudadanos nos configuraremos para poder decidir qué hacemos con ese espacio y que no venga una constructora y que diga que cuesta 800 millones y como es mío lo construyo hasta el último centímetro. No es un espacio cualquiera", afirma Elórtegui. Quieren poner en valor este espacio ícono de la región y ya están adhiriendo socios, preparan algunas actividades para el mes de octubre y también una visita a la Comisión del Medio Ambiente del Senado.

Para ellos, esta lucha recién comienza.

Fuente: elmartutino.cl

1 comentario:

Anónimo dijo...

No se si vale la pena pelar por tan poca duna que queda, pienso que ya se perdió mas de lo aceptable. Solo me qudan los lindos recuerdos de mi infancia, cuando las dunas eran el patio de mi casa, las largas aventuras desde Higuerillas hasta Cochoa (mochila y cantimplora incluida. Y en mi juventud, LAS DUNAS, oooh que dunas...... Pero suerte, con el cometido.