Declarado Santuario de la Naturaleza en 1995, el Campo Dunar de Concón se ha transformado en la alternativa más cercana para los amantes del deporte extremo. Con diecinueve hectáreas de vegetación única, este espacio natural se ubica a sólo pasos del centro de la comuna y es, sin duda, un imperdible para quienes también quieren disfrutar en familia.
Este santuario natural cuenta con una historia de más de 25 millones de años y una de sus peculiaridades es que está formado por un ecosistema único e irrepetible; como lo son las dunas antiguas “colgadas” sobre terrazas marinas que se encuentran separadas por un acantilado rocoso.
Sin duda, el océano pacífico es su telón de fondo, envolvente y cautivador de todos sus visitantes y espectadores. Un riquísimo ecosistema y una panorámica abismante, que han sido la inspiración de libros y poemas, como “Las Dunas de Concón” de Sergio Elórtegui Francioli.
Las dunas de Concón son ideales para disfrutar la brisa marina y la majestuosidad del entorno natural, en compañía o en soledad. Las caminatas son siempre la alternativa, así como la contemplación y la relajación. Dentro de las actividades características del lugar se destacan también el motociclismo y sandboard.
De acceso libre y gratuito, el Campo Dunar se extiende desde la parte alta del Puente La Lechuza, por el camino costero Viña del Mar y Concón, hasta el extremo norte de Playa Cochoa. La principal entrada está frente a Bosques de Montemar y cuenta con estacionamientos y paraderos de locomoción colectiva.
Desde Viña del Mar, en automóvil o transporte público, por la subida Los Ositos de Reñaca y desde Concón por la avenida principal.
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